Para la ocasión la Santísima Virgen viste saya realizada con un magnífico tejido espolinado en sedas de colores e hilos metálicos dorados y plateados del segundo tercio del siglo XVIII, confeccionada en 2018 por Dña. Mª del Carmen Barrero a partir de una antigua casulla. Sobre su pecho luce escapulario bordado en oro y sedas de colores de principios del siglo XX.
Cubre su figura con manto de raso blanco bordado en aplicación por D. Guillermo Olivares Magro y donado por él mismo entre 1970 y 1980. Toca su cabeza un chal de encaje de tambor fechado en el siglo XX como toca de sobremanto. A modo de tocado luce una magnífica pieza de encaje de aplicación de Bruselas, de hacia 1850, donado por un nutrido grupo de devotos con motivo del VIII Centenario fundacional de la Orden de la Merced. Luce antiguos puños de encaje donados por un hermano.
Por último, ciñe su cintura un hermoso galón brocado a modo de la tradicional correa del hábito mercedario, donado por fray José Modesto Pascual Almonte, O. de M.
En su mano derecha luce cetro de plata signo de realeza y cepo de grilletes cedidos para la ocasión por nuestras Hermanas Mercedarias de Marchena, y en la izquierda escapulario bordado en oro por José Manuel López en 2014. Culmina su iconografía el juego de corona y ráfaga plateadas.
El exorno floral del altar, elaborado por Floristería Arrabal, se compone de clásicas jarras cónicas de clavel blanco con relleno de esparraguera plumosa.
