Ntra. Madre y Sra. de la Merced, luce ataviada por su vestidor y camareras, para la festividad de Todos los Santos y la conmemoración de los Fieles Difuntos de la Orden de la Merced.
Para esta ocasión viste hábito compuesto de saya y escapulario de raso blanco con bordados en aplicación realizado por Guillermo Olivares en la década de 1980. El manto es una pieza moderna de damasco blanco brocado en hilos dorados siguiendo dibujos bizarros, y se cubre por la cabeza con una mantilla de encajes de mediados del siglo pasado.
El tocado está realizado con paño de lino natural y encaje de bolillos. El niño Jesús viste túnica de damasco blanco brocado en hilos dorados.